Hasta 1945 se describieron cinco subespecies, de las cuales tres se distribuyen en territorio nacional: Antilocapra mexicana, Antilocapra sonoriensis y Antilocapra peninsularis.
Es una especie de lagartija que cuida las plantas de insectos nocivos y sirve de proteína a otros organismos del ecosistema natural. Es nativa y endémica de Acapulco, Guerrero.
Esta especie se encuentra en casi todas las montañas del oeste de México, en los estados de Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Nayarit, Zacatecas, Jalisco y Michoacán.
Los procelariformes son aves marinas que se caracterizan por tener picos con tubos nasales sobresalientes y alas largas y estrechas, que les permiten surcar los vientos planeando sobre el mar largas distancias.