DESIERTO DE LOS LEONES
Educación Ambiental México

Desierto de los Leones, la primera Área Natural Protegida en México

En su historia está no sólo el haber sido sede del convento de los Monjes Carmelitas Descalzos (1611-1814), sino ser campo de maniobras y lugar de acuartelamiento del cuerpo nacional de artillería en 1845.

En su historia está no sólo el haber sido sede del convento de los Monjes Carmelitas Descalzos (1611-1814), sino ser campo de maniobras y lugar de acuartelamiento del cuerpo nacional de artillería en 1845.


Por: en15dias.com / con información del Gobierno de México
Fotos: Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales

Archivo: Casasola. D.R. Instituto Nacional de Antropología e Historia, México. / Liga: http://mediateca.inah.gob.mx/islandora_74/islandora/object/fotografia%3A328295

En su historia está no sólo el haber sido sede del convento de los Monjes Carmelitas Descalzos (1611-1814), sino ser campo de maniobras y lugar de acuartelamiento del cuerpo nacional de artillería en 1845 o la ubicación de una supuesta fábrica de vidrio, en la que en realidad se acuñaba moneda falsa y alimentaba sus hornos con madera del propio bosque.

Archivo: Casasola. D.R. Instituto Nacional de Antropología e Historia, México. / Liga: http://mediateca.inah.gob.mx/islandora_74/islandora/object/fotografia%3A4413

El Desierto de los Leones también es el inicio de la política de conservación ambiental de nuestro país. Desde 1786, el Gobierno ya lo protegía por los numerosos manantiales de agua potable ahí originados y que abastecían a la Ciudad de México. Incluso, la Cédula Real del 18 de noviembre de 1803 otorgó a la ciudad la propiedad exclusiva de estos manantiales.

Cuando era presidente, Sebastián Lerdo de Tejada, en 1876 —62 años después de que el convento fuera abandonado— definió la necesidad del entonces Distrito Federal de aprovechar los manantiales y declaró los montes como zona de reserva forestal e interés público. Ante el clamor unánime de la prensa y la sociedad se decidió la conservación del Bosque Desierto de los Leones.

Archivo: Casasola. D.R. Instituto Nacional de Antropología e Historia, México. / Liga: http://mediateca.inah.gob.mx/islandora_74/islandora/object/fotografia%3A4415

El investigador mexicano Miguel Ángel de Quevedo, impulsor y donante de los Viveros de Coyoacán, trabajó en 1917 por la protección de las cuencas de ciudades importantes y el establecimiento de Parques Nacionales y Reservas Forestales, en espacios con valor escénico y ambiental.

De Quevedo convenció al entonces presidente Venustiano Carranza de establecer el Desierto de los Leones como el primer Parque Nacional de México.


¿Un bosque llamado desierto?

Antes de que fuera Área Natural Protegida, se le conoció con el nombre de “El Desierto de nuestra señora del Carmen en los montes de Santa Fe”. Se le llamó “desierto” no por sus condiciones geográ­ficas – en realidad es un bosque de coníferas—, sino por un tema de población.

FOTO: Gobierno de México.

Los Carmelitas Descalzos ubicaban sus conventos fuera de las ciudades, en zonas desiertas. Respecto a cómo adoptó “de los leones”, existen dos versiones: una se refiere a que en el bosque habitaba el gato montés, parecido al león, y otra hace mención a los hermanos León, dueños de las tierras y representantes de los Carmelitas ante la Corona Española.


Un poco de historia

El bosque del desierto de los leones debe su nombre, posiblemente, a la disputa por la posesión del monte, sostenida entre una familia de apellido León y un cacique llamado Patiño de Iztolinque.

Posteriormente, en el año de 1604 el sitio fue elegido por los Monjes Carmelitas Descalzos para levantar ahí el convento de su orden, llamándolo Desierto, como a todas las fundaciones que establecían fuera de las ciudades.

En el año de 1604, el Virrey Marqués de Montesclaros expidió la Cédula Real que otorga de manera definitiva la propiedad de los montes de Santa Fé y Tacubaya (sitio donde se ubica el parque) a la Orden de los Carmelitas Descalzos (Melo, 1978).

FOTO: Gobierno de México.

El 23 de enero de 1606 fue colocada la primera piedra por el Virrey de la Nueva España, Juan de Mendoza y Luna, Marqués de Montesclaros, para la construcción del convento, las 10 ermitas (El Portón, La Soledad, San José, San Elías, San Juan, Magdalena, Trinidad, Getsemaní, San Alberto y San Miguel) (SARH, 1994) y la muralla que rodearía al área. Estas obras fueron terminadas el 12 de julio de 1611.

Los miembros de esta orden ocuparon el lugar durante más de 200 años, etapa durante la cual el bosque permaneció sin explotación y en general, bien conservado (COCODER, 1993).

Desde 1786, el desierto de los leones era ya protegido por el gobierno, interesado en su conservación por los numerosos manantiales ahí originados y cuyas aguas abastecían a la Ciudad de México.

La Cédula Real del 18 de noviembre de 1803 otorgó a la ciudad la propiedad exclusiva de estos manantiales (COCODER, 1993).

En el año de 1814, los carmelitas abandonaron el lugar a causa de la guerra de independencia, por lo que la provincia San Alberto de Carmelitas Descalzos cedió al gobierno de la Ciudad de México el monte, el convento y las demás construcciones (COCODER, 1993).

FOTO: Gobierno de México.

En 1845, el gobierno de la república utilizó al bosque como campo de maniobras y lugar de acuartelamiento del cuerpo nacional de artillería.

En este mismo año fue destruida la capilla principal para instalar una supuesta fábrica de vidrio, en la que en realidad se acuñaba moneda falsa y alimentaba sus hornos con madera del propio bosque, continuando así por varios años (COCODER, 1993).

Con el presidente Lerdo de Tejada, en 1876, se consolidó la necesidad de aprovechar los recursos hídricos que abastecían a la Ciudad de México y declaró los montes como zona de reserva forestal e interés público (Melo, 1978).

Debido a la belleza natural de sus paisajes y al alto interés histórico de las ruinas que en él se encuentran, el presidente Venustiano Carranza promulgó un decreto que le otorgó la categoría de Parque Nacional.



Decreto de protección

El 27 de noviembre de 1917, el presidente Venustiano Carranza decretó la primera Área Natural Protegida de México: El Parque Nacional Desierto de los Leones, ubicado al suroeste de la Ciudad de México en las delegaciones Cuajimalpa y Álvaro Obregón, que abarca una superficie de mil 529 hectáreas de bosque de pino.

CHECA EL DECRETO:


El 19 de diciembre de 1983, el Presidente Miguel de la Madrid Hurtado decretó la expropiación de 1,529 ha a favor del Departamento del Distrito Federal, para destinarlas a la preservación, explotación y embellecimiento del desierto de los leones.


El 18 de agosto de 1988, el gobierno de Miguel De La Madrid decretó que por causa de utilidad pública se expropia una superficie de 1,529-00-00 hectáreas a favor del Departamento del Distrito Federal quien la destinará a la preservación, explotación y embellecimiento del parque cultural y recreativo conocido con el nombre de Desierto de los Leones.


El 23 de septiembre de 1998, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, el decreto por el que se declaran zonas de restauración ecológica diversas superficies afectadas por los incendios forestales de 1998. Dentro de estas zonas quedaron incluidas 400 hectáreas del Parque Nacional Desierto de los Leones y algunas zonas aledañas.


El 16 de abril de 1999, la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca firmó con el Gobierno del Distrito Federal el Acuerdo de Coordinación mediante el cual el Gobierno Federal transfirió la administración del Parque Nacional Desierto de los Leones al Gobierno del Distrito Federal, lo cual se concretó mediante el acta de entrega-recepción del 24 de noviembre del 2000.


El 5 de junio de 2006, se publicaba el “Aviso mediante el cual se informa al público en general que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha concluido la elaboración del Programa de Manejo del área natural protegida con el carácter de Parque Nacional Desierto de los Leones, ubicado al poniente de la Ciudad de México, dentro de la demarcación territorial de las delegaciones políticas de Álvaro Obregón y Cuajimalpa de Morelos, en el Distrito Federal”.


Meses después es publicado el Programa de Manejo del área natural protegida.

El Programa de Conservación y Manejo del Parque Nacional Desierto de los Leones, representa un instrumento de planeación basado en el conocimiento de la problemática del área, de manera que permite establecer las acciones necesarias para el mejoramiento de los recursos naturales existentes.

En los diferentes subprogramas que componen este documento se planteó abordar la problemática de manera global, es decir, diferentes factores y actores inciden sobre un mismo problema, por ello es necesario trabajar sobre esta diversidad de factores para lograr la solución deseada.


Fue hasta el 19 de marzo de 2014 que instaló el Consejo Asesor del área natural.


En la actualidad el Desierto de los Leones es un espacio natural, hábitat de cinco especies endé­micas de mamíferos y 94 aves migratorias.

Además de sostener a un número de especies de flora y fauna, esta área favorece la retención de la humedad y la recarga del acuífero, previene la erosión, contribuye a mejorar la calidad del aire.

El Parque Nacional Desierto de los Leones se tienen representados bosques de oyamel, pino y encino, así como bosque mixto. Alberga 392 especies de flora y hasta 102 clases de hongos.

FOTO: Gobierno de México.

Entre sus variedades de flora destacan: oyamel (Abies religiosa), cedrón (Juniperus monticola), madroño borracho (Comarostaphylis discolor), cedro blanco(Cupressus lusitánica) y mazorquita (Morchella conica).

Junto con los bosques de la Cañada de Contreras y el Parque Nacional Insurgente Miguel Hidalgo y Costilla, el Desierto de los Leones es el hábitat de numerosas especies de fauna silvestre endémicas.

Se reportan 53 familias de vertebrados, de las cuales 3 corresponden a anfibios, 4 a reptiles, 33 a aves y 13 a mamíferos.

Entre las especies más representativas se encuentran la víbora de cascabel transvolcánica (Crotalus triseriatus), el lagarto alicante (Barisia imbricata), la codorniz-coluda neovolcánica (Dendrortyx macroura), el lince (Lynx rufus), el coyote (Canis latrans), la rana de árbol plegada (Hyla plicata), el ajolote (Ambystoma altamirani) y el armadillo (Dasypus novemcinctus).

Adicional a su alto valor biológico, ambiental y ecológico, el Desierto de los Leones juega un papel importante en la oferta recreativa y de esparcimiento para los habitantes de la Ciudad de México.


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1 comment on “Desierto de los Leones, la primera Área Natural Protegida en México

  1. Teresa

    Me gusto mucho el reportaje descubro mucha información interesante.

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